Amigos en este post en #Yuyosyalgomas les hablo de jardinería, porque además de gustarme mucho, me desestresa me pone en contacto con la naturaleza. Y me hace apreciar cosas que están ahí y que a veces pasamos por alto que son maravillosas. Que nos hace pensar que pequeños que somos en este universo de cosas tan grandes y complejas.

Es muy fácil hacer una planta y esperar unos días y,  empezar  a verse sus brotes y luego sus flores y estas  empiecen a llenarnos de alegría con su aroma, pero que hay si tenemos que esperar años para ver un resultado, ¿estaríamos dispuestos a trabajar mucho y esperar?

Eso mismo es lo que sucede con el arte milenario del Bonsái.

Hoy casi todos conocemos lo que es un Bonsái o al menos eso intentamos comprender.

La definición de Bonsai, que podemos encontrar en libros y revistas de tema lo traducen como ´´árbol plantado en maceta´´ esto es a medias cierto, no todos los árboles en macetas son Bonsái, si refinamos un poco esta simple traducción, deberíamos sentir que nos encontramos frente a un gran paisaje al verlo, entonces ahí sí estaríamos frente a un verdadero Bonsái.

Historia del Bonsái

Surge en la milenaria China.

Las fechas de sus comienzos son bastante confusas, se sabe que en el año 2000 a.de J.C los chinos cultivaban plantas en macetas; la admiración por parte de los chinos hacia la naturaleza se ve reflejada en la pintura, la poesía, la cultura y también la música en el siglo 500 a.de J.C ya se hacía el trasplante de grandes árboles y se realizaban acodos para su reproducción, es aquí donde surge el clásico ´´acodo chino´´.

Pero para entender esta fascinación por la parte de los chinos hacia la naturaleza, debemos adentrarnos en su religión, ellos adoptar dos corrientes que conviven entre sí, las enseñanzas de Confucio, qué se basan en las relaciones humanas y sociales y el Taoísmo que marca la pauta de las relaciones humanas con el entorno.

Es aquí donde surgen los jardines imperiales, donde se les permite una mayor soltura, liberando de esta forma la rigidez marcada por Confucio en otras áreas.

Estos jardines representan lagos, montañas, riachuelos y rocas, formando así una suerte de microcosmos.

Entonces surge la obsesión de descubrir el elixir de la vida por parte de los taoístas y así alcanzar la inmortalidad esto les permite ir adquiriendo una serie de conocimientos en plantas y minerales, surgiendo de esta forma una suerte de medicina natural.

Las creencias detrás de este arte

Creían que miniaturizado un objeto, podría llegar a manipular sus propiedades mágicas.

El Bonsai surge como una posibilidad en ese largo trayecto.

Se sabe que una de las primeras personas en practicar este arte fue un mandarín chino llamado Tong kwo Ming (IV d.de J.C) qué dejo sus actividades para cultivar crisantemos en macetas.

Por ese siglo, los hombres que eran conocidos como ´´literarios´´ profundizaban en áreas como la caligrafía, la pintura, la poesía y también el Bonsái.

Pero en el periodo de (VI y VII), es que monjes Taoístas, convertidos al budismo, huyen a Japón, llevándose consigo este arte.

El lento cultivo y paciencia que se requieren para hacer arboles Bonsái, permitía a los monjes una forma de meditación. Y lo que es más difícil de aceptar por los occidentales, es que ellos no se sentían frustrados por saber que los árboles continuarían desarrollándose aún después de que murieran.

La práctica del bonsái está considerada una forma de arte de características muy especiales ya que es una obra de arte que nunca está terminada es; viva y cambiante.

Cualquier tratamiento que hagamos, malo o bueno, se verá reflejado en la silueta general del árbol.

Imágenes cortesía de: Pinterest.es