El peeling, (el inglés pee- pelar) consiste en la aplicación de agentes químicos exfoliantes que provocan un nivel controlado y parejo de destrucción de tejidos, los cuales son reemplazados por una capa nueva y uniforme de tejido neoformado. #Tipsdebelleza

¿En qué consisten el peeling?

Es decir que son tratamientos de renovación celular que ayudan a eliminar  arrugas, manchas, secuelas de acné y cicatrices.

Este tratamiento de peelings se realizan durante el invierno puesto que se debe evitar la exposición solar. Ya que las defensa de nuestra piel frente a los rayos solares se ve disminuido durante su tratamiento. Y por lo tanto en una pantalla solar resulta obligatorio.

¿Cómo se  clasifican los peelings?

Los peelings se clasifican de acuerdo a la profundidad del daño tisular. Que producen y de esta manera tenemos los más superficiales (eliminan el estrato córneo o primera capa de la epidermis); medios (sigan la dermis papilar o primera capa de la dermis); medio-profundo (compromete el dermis medio);  profundos (llegan a la segunda capa de la dermis o dermis reticular).

¿Qué factores determinan la profundidad de un peeling?

La profundidad del peeling va a depender de distintos factores tales como: el tipo de agente químico utilizado, la concentración del agente.

(Cuando mayor sea la concentración más penetra), el pH de la gente (cuanto más bajo y por tanto más ácido mayor penetración), el vehículo del  agente ej. Soluciones,  geles,  cremas, teniendo en cuenta que a mayor viscosidad menor penetración, el tiempo de exposición al agente (a mayor tiempo mayor penetración) la técnica utilizada.

(Aplicación con gasa, pinceles, a mayor fricción mayor penetración), la preparación previa de la piel, y el área cutánea considerada (cara, párpados, cuello, escote o zonas corporales como las manos a la espalda).

¿Cuáles son los agentes más frecuentes utilizados en cosmética?

Los más comúnmente utilizados son el grupo constituido por los alfa hidroxiácidos también conocidos como ácidos frutales llamados así porque son normalmente encontrados en frutas y alimentos.

Dicho grupo constituye un grupo de ácidos orgánicos que se utilizan desde hace muchos años para el cuidado médico de la piel y para el tratamiento de diversas afecciones cutáneas.

El grupo está conformado por el Ácido Glicólico, el Mandelico, el  Láctico, el Málico, el Cítrico, el Tartárico.

Al pertenecer a la misma familia inducen cambios comunes en nuestra piel, como son los cambios en la textura y el color de la misma. Pero cada uno de ellos presenta particularidades que los vuelven más adecuados para tratar una u otra afección y será  el profesional quien elija el más indicado.

¿Son los usos más frecuentes de dichos ácidos?

Utiliza en el tratamiento del Acné y sus secuelas, el fotoenvejecimiento cutáneo, arrugas finas alrededor de la boca y los párpados, en el tratamiento del Melasma (manchas cutáneas) tanto faciales como corporales, y en tratamientos pre- quirúrgicos.

En todos los casos anteriormente enumerados con óptimos resultados y también es válido mencionar que potencian cualquier tratamiento cosmético que estemos realizando. Pues los mismos disminuye el grosor del estrato córneo y por tanto todo lo que apliquemos posteriormente va a penetrar más en la profundidad de la piel. Es así que en tratamientos para deshidratación cutánea o anti-age resultan grandes aliados.

Si además aprovechamos nuestros tratamientos con la aparatología adecuada los efectos son ideales.

Imágenes cortesía de: nightingaleandco.es tucuerpohumano.com blog.hola.com cirugiacosmedica.com