Tallarines de colores.

tallarines-8

Recuerdan que les conté que a mí me gustaban más los tallarines de la abuela María, los más pálidos.

Bueno como prometí  les digo la receta:

1 huevo

200 ml de agua fría

2 cucharadas de aceite (usen uno que no aporte gustó solo usamos el aceite para dejar la masa más suave en éste caso)

Sal

Como en la receta anterior, cascamos el huevo en un bol y batimos con el agua  el aceite, también la sal.

Vertemos harina de a poco la necesaria para lograr una masa suave.

Ésta masa es más húmeda que la anterior porque la masa cuanto más huevos tiene se seca más rápido.

El procedimiento ahora es el mismo que el anterior.

Mucha harina en la mesa, dividir la masa y a estirar.

Recuerden ir girándola para que nos quede lo más redonda posible, cuando esta finita ya la dejamos orear bastante.

Luego hacemos el rollito de masa y cortamos sobre una tabla.

¿Cuál es el secreto de la abuela para no cortarse?

Bueno, todo radica en como ubicamos los dedos….. si.

La puntas de las uñas deben estar hacia adentro y la cuchilla debe pegar en los nudillos cuando corta ¿les parece muy difícil?

No lo es, solo requiere práctica, pero les muestro una foto para que se den cuenta como es.

tallarines

Créame yo lo aprendí de niña y nunca me corte.

Para hacer los tallarines rojos:

1 huevo

1 morrón rojo

2 cucharadas de aceite (el que prefieran)

Sal

Harina la necesaria

En una procesadora colocamos el huevo el morrón el aceite y la sal.

Lo procesamos muy bien hasta que el morrón queda bien triturado, entonces en un bol mezclamos harina necesaria.

Para los tallarines verdes usamos la misma receta que la anterior, suplantando el morrón por….

– 2 puñados de espinaca

Bien lavada y bien seca, porque la espinaca de por si va a largar mucha agua cuando la procesemos.

Al igual que el morrón debe quedar muy procesada, luego seguimos como el procedimiento de la receta anterior.

Bueno estas son las recetas clásicas de la abuela María la disfrutábamos los domingos en su casa o cuando íbamos a pasar el día a el campo a  Colonia Italia la casa de mi tía abuela.

Mientras los redondeles de masa colgaban en la vieja mesa de madera secándose yo disfrutaba jugando en el campo hasta la hora del almuerzo. Los rallos de sol que me envolvían los terrones de tierra el tambo donde estaban las vacas, los dos ranchos de adobe y paja de dos aguas que componían la casa, el humo de la cocina a leña el aljibe los teros gritando, cuantos recuerdos…….

Y el broche de oro de los tallarines caseros, el tuco de Mamá mmmmmm.